Anjaneyasana: postura del hijo de Anjana
Es una postura de extensión que conjuga varios elementos como la concentración, la coordinación y el equilibrio. En este artículo te contamos más.
🧐¿Sabes cuál es la simbología de Anjaneyasana?
Anjana, era una apsara, ser femenino sobrenatural de las nubes y las aguas, hermosa y juvenil con excelentes dotes en el arte de la danza que nació en la tierra como una princesa vanara (nacida en el bosque). Anjana deseaba profundamente ser madre, por eso oraba diariamente por el milagro de un niño, el Dios del viento Vayu admiraba mucho a Anjana y cuando escuchó su oración decidió ayudarla, bendijo algunos granos de arroz y los envió con sus amigos pájaros para que volaran hacia ella. Anjana estaba ocupada en su ritual de oración diario, tenía los brazos estirados hacia arriba en anjali mudra, lista para recibir la gracia de Dios cuando en cambio, recibió unos granos de arroz, ella sabía que no debía cuestionar lo que le llegaba a través de la oración, así que abrió la boca y los pájaros arrojaron el arroz. Al consumir el arroz bendito quedó embarazada convirtiéndose luego en la madre de Hanuman.
Beneficios de Anjaneyasana 😇
Por ser una postura de extensión, libera la rigidez y trabaja diferentes músculos a lo largo del cuerpo permitiendo que circule toda la energía y se sientan beneficios como:
● Fortalecimiento de piernas y brazos
● Provoca una fuerte expansión de pecho, ayudando a una buena respiración
● Permite el estiramiento de las caderas y la ingle
● Regula el sistema digestivo
● Fortalece los músculos de la espalda, las piernas y las articulaciones
● Desarrolla el equilibrio corporal
● Estimula la flexibilidad de casi todo el cuerpo
● La espalda se hace más flexible, saludable y mejoran sus dolencias (en caso de tenerlas)
● Tonifica los músculos abdominales
● Crea conciencia del plano lateral
● Incrementa la agilidad
● Quema grasa y aumenta la masa muscular de los glúteos
● Ayuda a coordinar mejor los movimientos del cuerpo
● Permite coordinar cada movimiento con la respiración
● Alivia el estrés, ofrece paz mental y reduce la depresión
● Fortalece la estabilidad interior
● Activa la circulación
● Contribuye con la flexibilidad de mente y cuerpo
● Alivia los dolores menstruales
Esta postura además concentra el fluir energético desde los dedos de los pies hasta los dedos de la mano. A nivel energético, Anjaneyasana activa el cuarto chakra donde se centra el amor, la alegría y la entrega. Con la apertura de cadera se trabaja el elemento agua lo que ayuda con el fluir, ser receptivos y la conexión con el presente.
A continuación te dejamos un video para armonizar chakra corazón 💚 ¡Disfrútalo!
Recomendaciones antes de realizar la postura 📋
- Es importante tener mucho cuidado en el arqueo de la columna para no dañar la zona lumbar.
- Si se tiene experiencia y la postura está bajo control, recomendamos que con cada exhalación se profundice en este arqueo, así como en la apertura de las caderas.
- En caso de molestias en el cuello, es recomendable llevar la mirada hacia el frente.
Algunas contraindicaciones o precauciones a considerar si deseas realizar la postura son:
Por ser una postura de extensión, gran parte del apoyo en el suelo se hace con la rodilla, por lo que se puede producir algunas molestias, en este caso te recomendamos apoyar la rodilla sobre una manta o soporte; si sufres de problemas del corazón, consulta a tu especialista antes de considerar hacer esta postura.
Recuerda que existen herramientas que te ayudan a realizar la postura de una manera más cómoda.
Paso a paso para realizar Anjaneyasana
Con un firme propósito y actitud entusiasta, te propones a abrir tu corazón y dejar fluir la energía por todo el cuerpo dándole forma de luna creciente con estos pasos:
- De pie, con los pies al ancho de las caderas, das un gran paso hacia atrás con la pierna derecha y bajas la rodilla hasta que llegue al suelo.
- La rodilla izquierda queda flexionada y sientes como las caderas se van abriendo y bajando hacia la tierra.
- Desde esta posición, incorporas el torso y apoyas las dos manos sobre el muslo derecho mientras llevas el coxis hacia el suelo. Para poder mantener el equilibrio es necesario que actives la musculatura del abdomen y sientas cómo “creces” hacia el techo desde la pelvis y pasando por la cabeza.
- Enraíza la planta del pie adelantado y el empeine del pie de atrás.
- Cuando sientas que has llegado a estabilizar bien la base, inspiras profundo y levantas los brazos por encima de la cabeza, subes el tronco y expandes el pecho, arqueando con suavidad la espalda.
- Unes con suavidad las palmas de las manos, respiras y disfrutas de la postura.
- Para volver a la posición inicial, llevas el torso hacia adelante, apoyas ambas manos en el suelo y cambias de pierna para colocar la pierna izquierda delante.
- Al terminar de ejecutar la postura, puedes realizar balasana o la postura del niño para relajar la espalda y descansar.
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